Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN): Pruebas

Se considera bebé prematuro cuando nace vivo antes de que se hayan cumplido las 37 semanas de gestación.

La siguiente lista explica algunas de las revisiones, pruebas y exámenes en la UCIN a las que pueden someterse los bebés. Esta información te ayudará a entender y apoyar mejor a tu bebé prematuro.

Y, para obtener más información que te ayude a familiarizarte con la UCIN, asegúrate de expresar tus dudas al equipo médico y al personal de enfermería de tu hospital.

Pruebas comunes en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales

Examen del comportamiento

Una evaluación formal del comportamiento y el desarrollo, que la mayoría de los bebés tienen al menos una vez durante su estancia en la UCIN. Las mediciones se realizan mediante la Escala de Evaluación del Comportamiento Neonatal (NBAS), la Evaluación del Comportamiento del Lactante Prematuro (APIB) u otra herramienta. Si es posible, intenta estar presente en esta evaluación; es divertido ver todas las cosas que puede hacer tu bebé y cómo cambia y madura con el tiempo.

Análisis de sangre

Es uno de los procedimientos más frecuentes que se realizan en la UCIN. Cuanto más enfermo e inestable está el bebé, más a menudo se le hace un análisis de sangre. Los análisis de sangre pueden indicar si un bebé está anémico o si los niveles de bilirrubina son demasiado altos, por ejemplo. Muestran si un bebé tiene un nivel bajo de azúcar en sangre (hipoglucemia) o desequilibrios de sal o agua, todo lo cual puede causar problemas si no se corrige. Los análisis de sangre también pueden determinar si el bebé tiene una infección y, en ese caso, qué antibiótico debe utilizarse para tratarla. La sangre puede extraerse de una vía intravenosa o arterial, de una vena o de un pinchazo en el talón del bebé.

Pruebas de gases en sangre

Mediciones del oxígeno y el dióxido de carbono presentes en la sangre de tu bebé. Los gases sanguíneos se miden con frecuencia en los bebés con problemas pulmonares y/o cardíacos para poder mantener un buen equilibrio. Los resultados de las pruebas indican si es necesario ajustar el ventilador o si se requieren pruebas o intervenciones adicionales. Las muestras de gases en sangre se toman de una vía arterial colocada en la muñeca o el tobillo o a través del cordón umbilical. También pueden tomarse muestras a partir de una punción cutánea en el talón del niño después de calentar el talón, un procedimiento que puede denominarse "gas capilar". Los niveles de oxígeno y dióxido de carbono se denominan pO2 y pCO2. Si el bebé está muy enfermo, es necesario realizar las pruebas varias veces por hora.

Seguridad en el asiento del coche

Antes de que el bebé se vaya a casa, los médicos tendrán que comprobar si se le puede colocar en una silla de coche sin comprometer su respiración. Te pedirán que traigas tu silla de coche; el bebé será colocado en ella y luego se le conectará a un monitor respiratorio y a un oxímetro. Si su posición sentada crea algún problema con la respiración, habrá que hacer ajustes antes de que se vaya a casa.

Tomografía computarizada (TAC o TC)

Una forma avanzada de radiografía que enfoca un haz de energía sobre el tejido que el médico quiere examinar y luego utiliza ordenadores para crear una imagen bidimensional. Esta exploración suele realizarse a través del cerebro, pero puede utilizarse para visualizar muchas zonas del cuerpo. Para la prueba, tu bebé será llevado al departamento de radiología del hospital y posiblemente sedado para que no se mueva.

Ecocardiograma

Una forma especializada de examen por ultrasonidos, utilizada para estudiar la estructura y el funcionamiento del corazón. (El término eco puede referirse a cualquier estudio ecográfico, pero se utiliza con más frecuencia para referirse a un estudio del corazón). 

Electroencefalograma (EEG)

Prueba de ondas cerebrales que busca convulsiones u otras irregularidades en el funcionamiento del cerebro. Se colocan pequeños cables en el cuero cabelludo (no duelen) y se realiza una grabación de la actividad eléctrica del cerebro durante un periodo de tiempo.

Electrocardiograma (ECG, EKG)

Es el registro de la actividad eléctrica del corazón. Unos pequeños cables colocados en el tórax y en otras partes del cuerpo, y a veces en el esófago, recogen los impulsos desde distintos ángulos para ver si hay irregularidades en el ritmo cardíaco o cambios de tensión no deseados.

Evaluación de la edad gestacional 

Se trata de una evaluación de la madurez del bebé mediante características físicas, como el grosor de la piel, y signos neurológicos, como la flexibilidad. Estos resultados se comparan con los estándares para determinar la madurez de tu bebé en el momento del nacimiento, es decir, el tiempo que lleva en el útero. A veces se desconocen o son inexactos los datos maternos que utilizan la fecha de inicio de la última menstruación, por lo que las características del bebé ayudan a los médicos a evaluar su desarrollo en comparación con el de otros bebés.

Pruebas de audición

Los bebés prematuros y enfermos tienen un mayor riesgo de sufrir problemas de audición. Antes de que tu bebé se vaya a casa, es probable que le hagan una prueba de audición: una prueba de respuesta auditiva evocada del tronco cerebral (BAER) realizada por un audiólogo o una prueba de emisiones otoacústicas (OAE) realizada por una enfermera o un técnico. Unos pequeños sensores colocados en la cabeza del bebé transmiten información a una máquina que mide la actividad eléctrica de su cerebro en respuesta al sonido. En la prueba BAER, se colocan unos diminutos auriculares en los oídos del bebé y se emiten sonidos a través de una gama de frecuencias (tonos) y niveles de volumen (decibelios). Si tu bebé responde con normalidad, probablemente tenga una audición normal. Puede ser necesario repetir la prueba entre los 9 y los 12 meses, o incluso antes si tu bebé no supera una de estas pruebas, o si es muy pequeño o está enfermo en el momento de la prueba original.

Resonancia magnética (RM)

Es una técnica de imagen que, al igual que el TAC, puede producir una imagen detallada de los tejidos que puede ser difícil de ver en una radiografía o una ecografía. La RM puede utilizarse para visualizar el cerebro u otra parte del cuerpo. Ofrece una visión más detallada que el TAC en la mayoría de los casos, pero requiere sedación para mantener al bebé muy quieto durante un procedimiento ruidoso y algo prolongado. La resonancia magnética no utiliza radiación, sino que emplea potentes imanes y ordenadores para crear una imagen. Tu bebé será trasladado al departamento de radiología para esta prueba.

Prueba de cribado del recién nacido 

Prueba que se realiza pinchando el talón del bebé para obtener unas gotas de sangre en un papel de filtro. También conocida como prueba de PKU o NBS, este procedimiento comprueba la existencia de trastornos hereditarios graves. La mayoría de los estados exigen la detección de entre tres y ocho trastornos. Es posible que haya que repetir las pruebas en un bebé prematuro si la primera prueba se hizo muy pronto, antes de que se estableciera la alimentación, o si se hizo después de una transfusión de sangre.

Medición de la temperatura del bebé

En un bebé prematuro, es probable que la temperatura de la piel, la temperatura axilar y la temperatura rectal estén muy próximas entre sí, ya que el bebé es muy pequeño. Las mediciones de la temperatura oral y la temperatura del oído no son precisas en los bebés pequeños.

Ecografía

Procedimiento que utiliza ondas sonoras (en lugar de rayos X) para crear una imagen de los órganos del cuerpo del bebé. Se frota un pequeño dispositivo manual llamado transductor sobre la zona que el médico quiere ver. La ecografía es indolora y puede realizarse durante la monitorización en la UCIN. Una ecografía (también llamada sonografía) de la cabeza es la prueba habitual para diagnosticar una hemorragia cerebral. También se pueden visualizar otros órganos. Es posible que oigas referirse a las imágenes como ecos, como en "eco de la cabeza", "eco del corazón" o "eco del riñón".

Análisis de orina

Al igual que los análisis de sangre, los de orina pueden indicar mucho sobre el estado general de tu bebé. Los análisis de orina pueden mostrar el funcionamiento de los riñones y si el bebé tiene una infección. Los médicos pueden recoger la orina colocando un sistema de recogida de bolsas sobre los genitales ("bagging"), colocando un pequeño tubo en la vejiga ("cathing") o utilizando una aguja y una jeringa para extraer la orina directamente de la vejiga (una punción vesical).

Pesaje

Se pesará a tu bebé poco después del parto, y luego al menos una vez al día mientras esté en la UCIN. No te alarmes si tu bebé pierde algo de peso después del nacimiento o si su peso varía de un día a otro al principio. Esto es normal, sobre todo en los bebés muy pequeños. Cuando un bebé prematuro empieza a ganar peso a un ritmo constante, es una señal alentadora. Cada bebé tiene una tabla de peso junto a la cama para que los médicos puedan comparar su peso con el esperado para su edad ajustada. El aumento de peso constante es un precursor importante del alta hospitalaria. El peso suele expresarse en gramos para los bebés de la UCIN.

Radiografía

Herramienta de diagnóstico que proporciona imágenes de los pulmones y otros órganos internos del bebé. Estas imágenes ayudan al médico a planificar el tratamiento y a controlar la evolución. Tu bebé puede necesitar varias radiografías de los pulmones cada día si tiene problemas respiratorios graves o si hay dudas sobre el funcionamiento del corazón. Las radiografías suelen hacerse después de cada colocación de un tubo respiratorio o después de cualquier cambio en el tratamiento del bebé.

Fuentes