Lactancia y sueño de la madre y del bebé
La lactancia materna no solo es una fuente esencial de nutrición para el bebé, sino que también juega un papel clave en la calidad del sueño tanto del lactante como de la madre. La leche materna contiene triptófano, un aminoácido que favorece la producción de melatonina, la hormona encargada de regular el ciclo del sueño.
Además, el acto de como amamantar a un bebé estimula la liberación de oxitocina, lo que ayuda a la madre a relajarse y conciliar el sueño con mayor facilidad. En este artículo, exploraremos cómo la lactancia contribuye a establecer mejores patrones de descanso y qué beneficios trae para la salud de ambos.
Los recién nacidos duermen hasta 18-21 horas al día y hay mucha variabilidad en los patrones de sueño de los bebés. La investigación nos ha demostrado que el sueño permite a los bebés consolidar lo que han aprendido sobre el nuevo mundo en el que se encuentran. Nuestras investigaciones y las de otros estudiosos han demostrado que las rutinas consistentes a la hora de dormir pueden aumentar la duración del sueño y reducir el número de veces que los bebés se despiertan por la noche.
¿Amamantar da sueño? El sueño en la lactancia
La madre amamantando a su bebé puede generar una sensación de somnolencia en ambos debido a los efectos de ciertas hormonas liberadas durante la lactancia.
La succión estimula la producción de oxitocina y prolactina, dos hormonas que favorecen la relajación y el vínculo afectivo, lo que ayuda a la madre a sentirse más tranquila y predispuesta al descanso. Además, la leche materna contiene melatonina y triptófano, sustancias que regulan el ciclo del sueño del bebé y le ayudan a dormirse más rápido, lo que también puede influir en el descanso de la madre.
La lactancia y sueño de la madre suele ser diferente al de las madres que no amamantan, pero esto no significa que sea de menor calidad. Aunque los despertares nocturnos son frecuentes en los primeros meses, la lactancia facilita que la madre vuelva a dormirse rápidamente, ya que su cuerpo está preparado para sincronizarse con las necesidades del bebé. Estudios han demostrado que las mujeres que amamantan a su bebé suelen experimentar un sueño más profundo y reparador a pesar de las interrupciones nocturnas, lo que contribuye a una mejor recuperación postparto y a un estado de ánimo más estable.
Ahora bien, en caso de que el amamantar le dé sueño a tu bebé y quieras dejarlo cómodo para ese proceso, pero sin que se duerma, podrías amamantarlo teniendo su cama o cuna cerca, con lo que solo deberás voltearlo y acercarlo a ti para que pueda dormir tranquilo después de este proceso. Otro punto importante es ponerle un pañal cómodo y adecuado, los Pampers® Premium Care Pants serán de gran ayuda gracias a su gran absorción y calidad.
Así mismo debes saber que el sueño en la lactancia es real y tu pequeño puede quedarse dormido durante este proceso, por ejemplo, cuando se sienta satisfecho de alimento te darás cuenta con los movimientos de su boca. Si te preguntas, ¿cómo podría cambiar tu sueño siendo padre y madre? La respuesta puede ser algo larga, ya que ser padres involucra un cambio de horarios en el sueño, por ejemplo:
Las mujeres antes de convertirse en madres suelen dormir un par de horas más a comparación de los hombres.
Cuando se tiene al bebé, es más seguro que las madres casadas pierdan alrededor de 42 minutos de sueño cada noche a comparación de sus parejas.
Cuando se está en pareja, en el caso de los hombres, ellos suelen perder 30 minutos más de sueño a comparación de los casados.
El dormir junto al bebé es algo muy común, tan solo el 9 de cada 10 padres duermen con sus bebés en algún momento de la vida.
Si las mamás se encuentran amamantando al bebé tienen el beneficio de que duerman más de 20 minutos a comparación de las mamis que dan el biberón.
Lactancia y sueño de la madre
Así como tu bebé puede estar somnoliento, es probable que tú también obtengas sueño al amamantar, para evitar accidentes o situaciones que no sean beneficiosas para ambos, puedes intentar crear buenos hábitos junto a tu peque, por ejemplo cuando tu bebecito duerma sería un buen momento para que te unas a su siesta y ambos descansen. ¿Sabías que la lactancia materna ayuda a tener menos interrupciones de sueño? Por ejemplo, si en tu caso no prefieres hacer uso del biberón, podrías evitar el tiempo en preparar alguna leche de fórmula, en cambio, si tú prefieres amamantar, solamente es cuestión de que ambos estén ubicados de forma cómoda y puedan terminar de manera rápida y eficaz. Recuerda que si prefieres el uso de las mamaderas también estás en todo tu derecho para poder hacerlo, lo importante es que lo hagas de acuerdo a tu comodidad y a la de tu bebé.
Lactancia y el sueño del bebé
¿Cómo puedes evitar que tu bebé se quede dormido mientras lo amamantas? La lactancia y el sueño del bebé van de la mano, así que no te preocupes mucho por esto, a menos que veas que tu médico necesite intervenir, recuerda comentarle todas tus dudas para quedarte tranquila. Algunas cosas que puedes hacer para evitar estos momentos de sueño inmediato y que tu bebé pueda comer debidamente lo necesario, podrías probar algunas de las siguientes cosas:
Masajear la espalda a tu bebé mientras está sin ropita
Hacerle cosquillas en sus piecitos para que ría un poco
Hacerlo eructar
Probar los dos pechos para cambiar y fijarse si su pañal se encuentra algo sucio para cambiarlo
Antes de intentar estas sugerencias es recomendable que siempre comentes con tu médico lo que harás para que pueda darte su punto de vista sobre el tema. Ahora ya sabes más sobre este increíble y hermoso proceso de amamantar a tu pequeño y cómo el sueño está relacionado con esto.
Preguntas frecuentes
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