Claves de seguridad ante riesgos comunes y graves

La seguridad implica observar el entorno y adecuarlo a las habilidades y riesgos propios de tu bebé en ese período.

Es mejor establecer formas y lugares seguros para que tu hijo pueda explorar que pretender mirarlo en todo momento (una tarea casi imposible), pero algunos principios generales de seguridad funcionan con todos los niños.

Nunca dejes a tu bebé solo en lugares o momentos críticos

Incluso los recién nacidos pueden girarse o voltearse ocasionalmente, así que nunca dejes a tu hijo solo en la bañera, en una superficie elevada como el cambiador o una cama para adultos. Si suena el teléfono, lleva al bebé contigo (o deja que el contestador automático reciba la llamada). Nunca dejes a tu bebé solo en el auto, ni siquiera por un minuto.

Nunca sacudas al bebé.

En los primeros días, es difícil entender por qué llora tu bebé, pero nunca lo sacudas ni zarandees con violencia. El "síndrome del niño sacudido" puede tener efectos dramáticos.

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Reduce el riesgo del síndrome de muerte súbita infantil.

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Las investigaciones demuestran que colocar al bebé sobre su espalda para dormir disminuye el riesgo de muerte súbita en aproximadamente un 70 por ciento. También deberías hacer lo siguiente:

1. Mantén una temperatura ambiente confortable. Un niño pequeño tiene menos capacidad de ajustar su temperatura que un adulto, ya que sólo suda alrededor de la cabeza. Mantén su cabeza destapada y quítale una capa de ropa si tiene la cabecita sudorosa.

2. Verifica el área de dormir. El bebé debe dormir sobre un colchón firme. Evita las colchas muy gruesas, los edredones, las almohadas o las mantas de piel de oveja y los colchones de agua. Mantén las almohadas o los peluches grandes fuera de la cuna. Evita utilizar protectores para cunas.

3. Deja el cigarrillo. Los niños expuestos al humo como fumadores pasivos tienen el más posibilidades de riesgo. También considera que las casas de fumadores tienen un mayor riesgo de incendio y lesiones.

4. Amamanta si lo deseas o puedes. Los bebés que son amamantados tienen un menor riesgo de muerte súbita.

Asegúrate de que todo el equipamiento que uses para tu bebé sea seguro.

Todo lo que compres debe estar aprobado por la autoridad como seguro. Verifica con frecuencia que en su entorno no haya partes sueltas, bordes filosos o ásperos ni pintura descascarándose.

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Previene los ahogos

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Sigue estas recomendaciones para evitar los peligros de ahogo:

  • Evita ciertos alimentos como salchichas, uvas enteras, maníes, caramelos duros y zanahorias crudas.

  • Siempre alimenta a tu bebé mientras lo estás observando sentado. Asegúrate de que tu niño no camine ni corra con comida en la boca.

  • Las piezas sueltas de juguetes, botones o cierres y los juguetes que se rompen en pedazos representan riesgos para el bebé.

  • Inspecciona la ropa por dentro y por fuera, y fíjate si hay cintas o cordones sueltos, o cualquier cosa que pudiera enroscarse en el cuello o en los deditos de las manos o de los pies.

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Sé cautelosa con el agua

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Nunca dejes de observar a tu hijo cerca de piscinas, fuentes, playas o charcos. Protégelo de la siguiente forma:

  • Haz que la zona de agua sea una zona de acceso restringido. A menos que estés allí para supervisar, tus hijos no tendrían que ingresar.

  • Si tienes una piscina, colócale una cerca. Coloca una cerca con una puerta con traba que sea más alta de 1,2 m.

  • Presta atención a los flotadores. Los salvavidas de brazos, los aros de cintura para baño, los aros plásticos y otros dispositivos no garantizan la seguridad de tus niños. Mira a tus hijos directamente en todo momento.

En resumen

Para mantener la seguridad y ante riesgos comunes y graves, nunca dejes a tu bebé solo en lugares o momentos críticos, trata de no sacudirlo, reduce el riesgo de muerte súbita infantil, cerciórate de que el equipo que utilices con tu bebé sea seguro, prevé los ahogos, sé cautelosa con el agua.
Con estos consejos, mantendrás la seguridad en los espacios donde se desenvuelva tu bebé.

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